miércoles, agosto 16, 2006

Leido: Fiasco

Fiasco (1986) es la última obra en el campo de la ciencia-ficción del recientemente fallecido autor polaco Stanislaw Lem. También es la novela de la que se sentía más satisfecho, y la que muchos consideran su obra más reflexiva y madura. Con esta carta de presentación, me esperaba una novela por encima de su aclamada Solaris o --mi preferida-- El Invencible. Por desgracia, la novela sufre de un par de lastres que la traban innecesariamente: un arranque muy lento y disperso, y un final que (en mi personal e intransferible opinión) deja bastante que desear.

La premisa fundamental de Fiasco es demostrarnos que el contacto con otros seres completamente alinígenas puede ser imposible, debido a nuestras tan diferentes naturalezas. Este era uno de los temas favoritos de Lem, ya desarrollado ampliamente en Solaris y otras obras. En el caso concreto de Fiasco, el escollo principal parece ser el tiempo (el contacto solo puede darse en un estadio concreto de desarrollo de ambas culturas). Aun así, una expedición es mandada a un posible candidato a contacto en el planeta Quinta en el sistema Harpyae, utilizando un "truco sideral", para esquivar los efectos del retraso temporal de los viajes relativistas. Es un viaje "a ciegas", pues la nave debe partir mucho antes de que se pueda ni siquiera saber que habrá una sociedad suficientemente desarrollada en el destino, aguardándoles para el contacto.

Un punto de partida tan atractivo, sin embargo, se ve entorpecido por las causas ya citadas. Para empezar, partes de la primera mitad del libro parecen escrita "de relleno". El primer capítulo, dedicado a explicarnos como el astronauta que luego será nuestro protagonista queda atrapado en Titán, bien podía ser un relato aparte incluido en la saga de los Relatos del piloto Pirx. Un relato, por cierto, bien bueno (las descripciones de Titán son fabulosas, pero Lem se deja arrastrar por el entusiasmo más de lo debido, consumiendo páginas y páginas), pero que no aporta nada a la historia real de Fiasco, y que lo único que consigue es consumir 80 páginas de una novela de 460. Algo parecido podríamos decir de otros "relatos" embebidos dentro de la novela con calzador, como el de la montaña de Mazumac (una especie de holo-novela) o el cuento de CF sobre los hormigueros que lee el protagonista (muy del estilo de las historias pulp de los 20 y 30). Aportación de ambos a la trama general: bastante escasa, por no decir nula.

Por si esto no fuera suficiente, Lem adopta un estilo muy "hard"*. A mi particularmente no me molesta, ni me sorprende (particularmente ya me demostró en El Invencible que si quería, podía ser más hard que los que les gustaba etiquetarse de tal manera). Aunque leyendo esas densas explicaciones sobre la tecnología sideral me imaginaba que, sacadas de contexto y sin citar al autor, muchos no dudarían en calificarlas de "pedantes" en "infumables", achacándoselas a alguno de las tres B's. Pero ya sabemos que hay escritores y escritores, y (ya huelo el fuego de mi pira por hereje }:-P ) a algunos se les perdonan las mismas faltas que por las que a otros se les lapida inclementemente.

Pero en realidad, todo esto es anecdótico, porque el verdadero meollo de Fiasco está en su segunda parte, una vez metidos en harina del contacto con los quintanos. Y es aquí, en la conclusión, donde la obra realmente naufraga en mi opinión. Lem está tan obsesionado por demostrar la imposibilidad del contacto, que se "pasa de frenada". Vale, el primer contacto puede estar lleno de obstáculos, eso es asumible. Puede incluso fracasar. Pero de ahí, a convertir a los tripulantes en una especie de megalómanos idiotizados... va un abismo.

Porque así es como se comportan los tripulantes de la nave. Vamos, los paranoicos militares de La paja en el ojo de Dios son unas hermanitas de la caridad comparados con estos científicos. Porque eso es lo que son que son los tripulantes del Hermes: científicos de gran prestigio, arquetipos de personas cultas, cabales, inteligentes: el culmen de nuestra civilización. Una gente que precisamente si se les tiene que caracterizar por algo es por la paciencia o la constancia (la ciencia está plagada de fracasos, de muros que cuesta esfuerzos ingentes derribar), metidos es un magno proyecto de larga duración y destino incierto. ¿Ese es el perfil de una persona que, por no obtener resultados en cuatro meses, empieza a actuar como un maniaco irresponsable y amoral, por mucho que esté sometido a una fuerte presión? Bien, no niego que es aceptable que pueda darse en algún caso, pero... ¿sistemáticamente en todos?

El único personaje que no sucumbe a esta locura destructiva es, curiosamente, el personaje sacerdote. Él representa desde el principio el contrapunto de la expedición. La iglesia tiene como doctrina (así se nos cuenta) que le contacto es imposible porque Dios lo impide, acabando de un plumazo con un motón de problemas teológicos que se les plantearían si no fuera así. De manera que el único que está convencido desde el principio que la expedición será, efectivamente, un fiasco. También es el único que en todo momento sugiere la retirada (el abandono del proyecto como mal menor) cuando las cosas empiezan a torcerse. Y el único que mantiene una posición moral de que el fin (el contacto) no justifica los medios.

Y al final, se demuestra que es el que tiene razón.

Y se demuestra porque, despues de todas las trabas que Lem logra imaginarse, el contacto está a punto de producirse, de una manera u otra, después de todo el desastre acontecido. Y sin embargo, todo finalmente se tuerce, por un hecho completamente fortuito. Un deus ex-machina, pero al reves (en vez de la salvación, la condenación). Pero al fin y al cabo, un deus ex-machina como una catedral de grande.

Señor Lem, ¿el contacto es imposible porque a alguien se le pasó la hora? ¿Eso es lo que está intentando decirme? ¡Joder, que no estamos hablando de la hora del dentista!

Y eso que esa es la conclusión a la que prefiero agarrarme, porque la otra posibilidad --que realmente había un "Dios" que mediante un "azar" (imponderable) interviene para impedir el contacto-- me resultaría completamente inaudita en Lem (aunque, quien sabe, tal vez esté completamente equivocado).

Comprendo el existencialismo y la visión pesimista de la condición humana del autor, una actitud esperable en alguien que ha vivido en primera persona los horrores de la II Guerra Mundial. Pero lo que no puedo aceptar es, por demostrar los argumentos existencialistas, violar el sentido común. Y los personajes de Fiasco no se comportan con sentido común. Y es esa falta de sentido común la que lleva la expedición a ser un fiasco, no la premisa de que el ser humano sea inherentemente malo y egoista. Por eso, la conclusión de la novela me resulta totalmente inaceptable, y esa es la razón de mi decepción.

Pero no todo el mundo opina igual que yo (más bien lo contrario). Así que si prefieren leer reseñas mucho más positivas, pueden echar un vistazo por ejemplo a la entusiasta entrada de la Wikipedia (no sé que hace una reseña --algo carente de toda objetividad-- ahí, pero bueno), a la reseña de ciencia-ficción.com o a la de C, el hijo de Cyberdark. Tampoco soy el único en criticar algunos aspectos, como podréis ver en los comentarios al libro en Sedice.com.

--
* Acabo de percatarme que Fiasco aparece en la lista de novelas hard de la entrada de la Wikipedia, y no porque yo la incluyera.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

En realidad Lem siempre ha postulado que el contacto es imposible. Corrijo, el contacto no, que muchas veces lo ha descrito, lo que Lem niega es que pueda llegar a existir entendimiento entre alienígenas, según él, su evolución, el despertar a la conciencia y el establecimiento de los procesos mentales es tan dispar que resulta casi imposible el entendimiento.

SOLARIS trataba de ello, LA VOZ DE SU AMO trataba de ello, EDEN trataba de ello, EL INVENCIBLE, trataba de ello, aunque Ijon Tichy si tuvo un cierto entendimiento con alienígenas durante sus expediciones, años más tarde Lem escribio REGRESO A ENTIA para decir que no, que en realidad Tichy, por desconocimiento, había estado metiendo la pata sistemáticamente en todas sus expediciones creando un considerable problema diplomático.

No es extraño entonces que en FIASCO Lem siga en la misma línea. De hecho no hay fracaso en el contacto ni en la comunicación. El fracaso viene dado porque los quintanos pasan como de comer calcetines usados de los terrestres, y éstos se comportan exactamente igual que se han comportado los terrestres en la Tierra durante milenios, en vez de largarse y dejar a los quintanos en paz se empeñan en meterles el dedo en el ojo diciéndoles "¡Eeeeh! ¡¡¡Qué estoy aquííí!!!" ¿O cuando una civilización, y más si es tecnológicamente superior, se ha retirado cuando los aborígenes les han pedido que se largaran?

Javier Cantero dijo...

Que yo sepa, existen muchos lugares en este planeta donde los aborígenes siguen viviendo como sus ancestros (p. ej el desierto del Kalahari o muchas islas del Pacífico). De todas formas, difícilmente puede ser comparado con una situación de "primer contacto", ya que los aborígenes son humanos, y los comprendemos perfectamente, aunque sólo sea porque nuestra historia nos retrotrae a épocas en que éramos como ellos. Otra cosa es que decidíeramos por ellos paternalistamente su destino (por ejemplo, que deban tener un estadio tecnológico superior para ser más felices). De hecho, estoy convencido que mucha gente estaría en contra de eso (personalmente pienso que tendrían todo el derecho --y la curiosidad-- por saber que existe un mucho más allá del suyo con muchas otras culturas diferentes; lo otro me parecería una especie de "Show de Trumman" para ludditas).

Creo que implícitamente te estás refiriendo a procesos de colonización, y en la novela, que yo sepa, no se va a colonizar Quinta, ni había ningún interés (económico, estratégico, ...) por su planeta. No creo que Colón se dedicara a reventar colinas a base de pólvora para llamar la atención de los nativos. De hecho, ni siquiera estaba donde él creía, y su motivación era buscar un ruta comercial hacia las Indias (seda, especias,...), no a establecer contacto con un nuevo continente. Si hubiera sabido que no estaba allí, y hubiera podido pasar, tal vez ni hubiera parado. Y en cualquier caso, todo lo que vino después dudo que sea equiparable a la novela.

No, mi principal pega sigue siendo la misma. Lem exagera por mantener sus tesis. Si querían manifestar su poder, podrían haberse cargado cualquier planeta, mucho más alejado de Quinta que su satélite y con escaso riesgo (y más "espectacular" si cabe). El principio de ojo por ojo que aplican los tripulantes del Hermes es desproporcionado incluso aunque fuera una tripulación militar en una misión frente a una civilización peligrosa. Y el final es totalmente arbitrario, sólo con que el transmisor lo hubiera llevado incorporado en su traje (cosa por otro lado bastante lógica) y repetido por el vehículo hubiera sido suficiente para evitar la hecatombe final. Un detalle nimio. Simplemente Lem quería que la novela terminara como termina y ya está. Que es lo mismo que sacar las conclusiones que uno le apetezca. Está en su derecho, pero no me digáis que es una reflexión profunda, cuando las conclusiones se sacan a partir de hechos fortuitos manipulados por el autor a su antojo.

Salmonoide dijo...

Gracias.

Tenía necesidad de recomendaciones de buena literatura de ciencia ficción, mi género como lector.

Solaris me ha durado un par de tardes y me ha gustado (creo) más que a tí, por lo que dices. El invencible me está costando más encontrarlo.

Solaris
-------

Coherente, ordenado, ritmo adecuado, original (es mi primer contacto con ese autor) pero me ha decepcionado un poco el final. Más que decepcionado, esperaba "algo". No sé muy bien qué, pero algo, un final, no simplemente un cese de la narración.

Quedan muchas cosas en el aire, ¿quién o qué sujetaba la mano desde el armario a uno de los técnicos? ¿Porqué consideran que no hay contacto cuando los "visitantes" son una excelente forma de contactar no explorada? Se me ocurre por ejemplo hipnosis, aunque por su diferente naturaleza puede que no funcionara, al menos pide ser un método probado. No se investiga esa vía, sólo como productos del océano, no como posible forma de comunicación.

No obstante, insisto en que me ha gustado y lo recomiendo.


Si tienes algo más que te haya gustado a tí, estaré encantado de leerlo.

Por mi parte haré una breve reseña, según me acuerde, de libros cifi que creo que no se deberían dejar pasar.

Saga fundación, los tres originales. El cuarto mantiene un buen nivel, aunque no alcanza a los tres primeros (aunque en extensión los supere juntos)

Saga de Ender, especialmente el primero, y algo menos, el segundo. En mi opinión, la saga va perdiendo calidad con los sucesivos volúmenes.

Saga del retorno, tambien de Card, como la de Ender. Se hace un poco lento a veces, pero vale la pena. Lo mejor es cómo se llega a conocer a los personajes a través de sus reflexiones y pensamientos.

Saga de Rama. Todos ellos. Quizás el primero un poco más, pero todos me gustaron mucho. Después de cerrar el último libro, eché de menos sus protagonistas

Saga Hechee. Pórtico destaca, pero los demás mantienen un muy buen nivel. Pohl en general me gusta mucho

Saga de Hiperion. Mi favorito. Los 4 libros excelentes. Quizas el segundo el más flojo, pero muchos podrían no estar de acuerdo. Me gusta más Simmons como autor de ficción que de terror. Hay un quinto relato corto que da el cierre a la serie.

Saga Xenogénesis. Sobre todo "Imago", pero no puede leerse sin haber leído los dos anteriores. No he leído nada más de Octavia B. No conozco el resto de su obra.

Quiero hacer notar la ausencia de S.King de esta relación. Aunqye tiene libros buenos, me he dado cuenta que sólo he mencionado sagas, y la única de King, que podría estar aquí, la Torre oscura, no me parece que dé la talla. A King le pasa mucho que no sabe cómo acabar sus libros. Después de leer IT, me prometí que no leería más de ese autor, a menos que tuviera opiniones contrastadas y favorables de su final.

Como libros sueltos:

King: Carrie, Misery. Seguramente tiene más buenos, pero no he leído muchos más de él. No son ciencia ficción, pero los pongo para que no parezca que deshecho toda su obra.

Asimov: Los propios dioses.

Herbert: Dune

Daniel Keyes: Flores para Algernon

Y del género no recuerdo ahora mismo más, pero seguro que me vienen en cuanto le de a 'Acceder y Publicar'

Saludos

PD. 6.262 impes perdidos en una genial emboscada de LGF, numantina defensa de la de 15, de su ataque posterior.

Javier Cantero dijo...

Pedazo de comentario. Vayamos por partes:

- Solaris sí me ha gustado, aunque tal vez un poco más El Invencible. Cuestión de gustos. El que no me acaba de convencer es Fiasco, aunque muchos lo ponen por las nubes. En cualquier caso, los finales de Lem son siempre abiertos, es marca de la casa. Algunos te dirán que eso es los bueno, y otros no. O:-)

- Hablando ahora en general sobre la crítica de novelas, cuando escribo una reseña mi objetivo no es decir "este libro es bueno", porque el gusto por la lectura es tan subjetivo que sería pura arrogancia. Yo intento contar de qué va y lo que me ha parecido el libro (a ser posible sin destriparlo) para que el que lea la reseña decida si le puede interesar o no. Pero la decisión es enteramente suya, yo no me hago responsable. :-)

- Puedo hacerte más recomendaciones (o si prefieres, proponerte más lecturas). La CF es uno de los géneros más heterogéneos que hay, con variados estilos, temas, etc. Caben todos los gustos, inclinaciones y tendencias. Sólo por el hecho de ir probando aquí y allá (como si fueran pintxos por la parte vieja xD) merece la pena. Y eso que también tengo mis filias y fobias, como todos...

(Hmmm, el párrafo anterior me da ideas para hacer una entrada en el blog)

Como no hay que fiarse de la opinión de una sola persona, te invito a que te pasees por los blogs de otros lectores habituales del fantástico. En esta página, por ejemplo, hay bastantes. También es interesante echar un vistazo a los foros herederos de la extinta cyberdark, como por ejemplo sedice.


- Y sobre la P.D. si te están atacando los LGF es porque seguro que estás bien alto en el top (no esperaba menos de tí ;-) ), y seguro que te recuperas pronto de la pérdida. ;-)

Salmonoide dijo...

Mmmm no, no me ha gustado mucho el invencible.

Empieza bien, se desarrolla bien, pero en cuanto descubren que son robotitos empieza a decaer para mi.

Y como con Solaris, no me gusta que las novelas queden sin acabar.

Aceptable, pero recomendaría antes que éste muchas otras obras

Javier Cantero dijo...

Ya te digo que esos finales "contemplativos" son marca de la casa. He leido 3 novelas suyas (las dos citadas y Retorno de las estrellas, que no me gustó nada) que terminan así.

Quitando el final, a mi me resultó bastante interesante el resto del desarrollo de la novela.

Si te diera por leer algún Lem más, yo que tú probaría con un registro completamente diferente: el de sus libros "humorísticos": Diarios de las Estrellas o Ciberíada.

Anónimo dijo...

La libertad creada en internet es maravillosa y por eso jamás criticaré la libertad de opinar de nadie. Ahora, yo sentiría vergüenza, y de hecho en estos momentos estoy sintiendo vergüenza ajena, por ver como alguien puede quererse tanto a sí mismo como para opinar de esa forma tan injustificada sobre una obra tan buena. Lo mejor son casi los comentarios, que si no me gustan los finales inconclusos, que si no me gustan que sean tan contemplativos... Hijo, vuelve a Harry Potter y cuando hayas madurado un poco replantéate volver a Lem.

Por cierto, Don Javier, perdone ustéd si le molesta mi corrección, los libros de Lem que usted comenta no son "humorísticos", se definen un poco mejor como "satíricos". Me puede usted decir las milongas que le salgan de donde quiera, pero ya que opina (critica injustificadamente) contra una obra tan importante, podría hacer un mínimo esfuerzo en encontrar la palabra adecuada.

Stanislaw Lem hizo, en mi opinión y en la de muchos, una gran obra con Fiasco. Si a alguien no le gusta que ridiculizase así a la especie humana, lo siento. Tenemos mucho por lo que ser ridiculizados y Lem hizo una jugada genial en este libro, que está entre mis favoritos. Junto a los satíricos, en los que hace la misma crítica, aunque quizás otros se quedan en la capa más supérflua.

Me ha resultado tan vomitivo este blog que voy a tener que ir yéndome. Tan solo un apunte más, ¿cómo metes lo del sacerdote para criticar la obra? Ni con el mejor calzador del mundo cuela. Lem deja mal a todos, incluído al sacerdote, uno de los primeros a los que ataca. Realmente en ningún momento le da la razón ni mezcla a Dios en nada (ahí menuda diarrea mental has tenido, háztelo mirar).

Léelo en unos años si has madurado, cuando dejes de leer libros hechos en fábrica y con miradas autocomplacientes y completamente predecibles y si eso ya hablamos.

Javier Cantero dijo...

Alucinante...

Si Lem levantara la cabeza, y tuviera la desgracia de leer tu comentario, inmediatamente se metería un tiro entre ceja y ceja de pura desesperación.

Una de las personas con mayor espíritu crítico, capaz de poner en duda hasta el mismísimo principio antrópico (que llevamos codificado en los genes), defendido por un dogmático, cuyo único "argumento" es decir que la obra es buena "porque yo y otros lo decimos" (y punto en boca).

No eres más que un fanboy. Afortunadamente la mayoría de los lectores de Lem (y de cualquier otro autor) son lo suficientemente inteligentes para saber a) que nadie es perfecto b) las opiniones son como los culos, cada uno tiene el suyo propio.

Todo lo demás no es más que un ataque ad hominen de alguien que como no tiene nada que refutar, se dedica a regugitar expresiones lo más ofensivas posibles para provocar a su "oponente", pero tratando de parecer "inteligente" (por cierto, no eres más que un pedante de tomo y lomo). Típica actitud infantil (pero yo ya soy perro viejo, conmigo no cuela).

Puedes leer a Lem todo lo que quieras, que jamás llegarás a comprenderlo. Lem nos habla de los humanos como seres intolerantes y llenos de prejuicios. Tu lo has dejado patente de sobra, una vez más.

Por cierto, sobre el tema "humorístico"/"satírico". Me pongo en la piel de un petulante academicista como tú, y entiendo que te resulte inaceptable que un autor de tu panteon partícular haga algo "tan zafio" como humor. Pero es lo que hace:"humorísticos" es el adjetivo que define _perfectamente_ (y eso que no está hecho a posta) obras como Diarios de las estrellas o Ciberíada. No "satíricos", puesto que la sátira es sólo una parte (y además la sátira suele ser indirecta en muchas ocasiones).

Claro que para darse cuenta hay que haberse leído los libros, y no sólamente las sesudas disquisiciones de "expertos en la materia".

Lleixes dijo...

A mi modo de ver, gran libro pero con dos tremendos fallos:
- el inicio en TITAN (¿qué aporta?)
- el final tan abrupto y facilón (¿porqué terminar así la historia?)

Lo bueno de la obra, las discusiones y vacilaciones entre los miembros de la tripulación y la maldad inherente en cualquier acto humano.

Mas en lleixes.blogspot.com

David.